top of page

 

 

“¡Mamá! ¡Mamá! ¡Por favor... quiero salir! Ya es la hora, mamá. No puedo más, no tengo más fuerzas... Empujo y empujo y no logro salir... Me siento atorada, asfixiada... ¡por favor...!. Dile a esa señora que no te gruña más, dile que el momento ya ha llegado...”.-

María Teresa estaba empapada en transpiración, los dolores eran cada vez más punzantes, profundos....-Partían desde lo más hondo de su ser... Las lágrimas corrían copiosamente por sus mejillas, dejando  surcos en su bonito rostro siempre alegre y sonriente, hoy congestionado a fuerza de tantas horas interminables de dolor.- Gemía calladamente, junto a otras mujeres... desconocidas hasta el momento, pero unidas  enfrentando la misma suerte.-

Por primera vez en su vida se encontraba sola, aislada de sus afectos, sin siquiera una mano amiga que la confortara infundiéndole valor.-Solo esa mujer gris , endurecida, cuya voz sonaba metálica, impersonal, inhumana.- Imperativa, déspota... sin ningún atisbo de compasión.-

“ ...a callar mujeres de una vez...- ¿Acaso creen que están en un estadio de fútbol? ¡Esta es la vida, espabílense!”.-

-Por favor señora... Ya no puedo más...

-¡Claro que puedes!.-¡Bien que en su momento te resulto agradable!...

-Quiero ver a  mi esposo...

-¿Qué sucede enfermera?.-

-¡Estas flojas que no saben parir en silencio!.-

-¿Cómo se encuentra señora?

-¡Mal doctor... muy mal!

-Vamos a examinarla.-Traiga el monitor fetal.-

-Hace muchas horas que estoy en trabajo de parto doctor...

-Eres primeriza, siempre es así... difícil, pero vale la pena.-

-¡Pero es insoportable el dolor... ! ¿Qué sucede?.-

-¡Enfermera, prepare la paciente para una cesárea urgente!.-

De pronto todo se nublo, María Teresa no podía entender que sucedía, pero por la expresión de su medico podía adivinar que no se trataba de nada bueno.-Los pasillos del hospital cobraron vida instantáneamente, en pocos minutos le pusieron una sonda, una vía intravenosa, la rasuraron... Desde lejos llegaban a sus oídos las palabras del medico y los murmullos del resto del personal.-

-Practicaremos una cesárea, el liquido amniótico esta verde, el feto está sufriendo... pero creo que estamos en tiempo...

-¡No entiendo, durante todo el día me han revisado cuatro médicos diferentes y todos invariablemente me decían que aun no era el momento!.-Llevo quince horas sufriendo...

-¡Tranquilícese, todo saldrá bien!.-El cuello del útero es grueso y duro, por eso no dilata... Dentro de poco tendrá entre sus brazos a su hijo.-

Camino a la sala de operaciones se encontró con Ramón, ninguno de los dos pudo articular palabra, pero el mudo lenguaje de sus ojos fue suficiente para darse ánimos mutuamente.-

“¿Qué sucede mami?, ¿por qué no logro escuchar tu corazón?.-No te alejes de mi, no me dejes sola... yo te quiero mamá, quiero conocer tu mundo, quiero vivir... ¿Y esa luz?, no se de donde viene pero me da mucho temor... alguien me esta rescatando, ¡gracias señor!.-Ahora estaré contigo mamá.-¡Que extraño todo lo que veo, es más claro que en tu vientre.-Tu estas ahí, me han puesto encima de ti , siento tu calor, tu perfume.-¡Que guapa eres madre!”

-¿Dónde está mi hijo?

-Se lo traerán en unos minutos, están examinándola... es una niña.-¡Felicidades mamá!.-

Minutos que se transformaron en horas interminables,  finalmente llego el momento mas anhelado de sus vidas.-Una sonrosada carita cubierta de pelusilla azabache asomaba entre los pliegues de la manta de encajes.-Era un rostro delicado, de finos y pequeños labios, con una pequeña y bien formada nariz.-Dos pares de ojos la miraban fijamente.-El mágico momento había llegado por fin.-El fruto de su amor estaba ahora ante sí y ellos la miraban con arrobo.-Era perfecta, más de lo que ellos la había soñado.-Desde los primeros días se mostró como una dulce niña, que apenas lloraba.-María Teresa disfrutaba del placer de amamantar a su hija, aunque esto a veces le traía complicaciones.-Ángeles dormía mucho y no mostraba demasiado interés por alimentarse, pero sonreía siempre.-

“Mamá no se porque de pronto estás tan triste, me miras y lloras.-¿Acaso he hecho algo malo?.-Me gusta que seas mi madre, eres cálida y suave y cuando me besas siento tu amor en mi corazón.-

El tiempo corre deprisa, veo a otros niños cuando vamos al parque, son de mi edad, pero parecen diferentes.-Ríen y emiten sonidos ¿por qué yo no puedo hacerlo yo?.-A veces intento moverme como ellos, pero no puedo.-Siempre voy en este coche donde me llevas de paseo, es agradable pero por la alegría que veo en los niños, creo que preferiría ir junto a ellos.”

-Lo siento señora su hija tiene un 95 % de minusvalía... El sufrimiento en el momento de nacer le ha afectado casi totalmente... Es una niña especial que jamás podrá caminar, ni hablar... A sido consecuencia de una  negligencia medica, lamento que nadie se lo haya dicho en su momento...

“¿Recuerdas mami cuando el doctor te dijo esas palabras?, tu lloraste amargamente.-Te abrazaste a papá y los dos me miraban con mucho amor en los ojos, pero con inmenso dolor.-Ese dolor no pude entenderlo entonces, pero ahora que ya han pasado más de veinte años sé de que se trata.-Esa señora gruñona quizás fue la responsable de todo... pero no importa mamá, yo ya la perdoné.-Con tu cariño y dedicación desde el día en que nací he sido muy feliz.-No me falta nada, en mi mundo todo es cristalino.-Juntas hemos vivido momentos increíbles.-En vacaciones, cuando íbamos a la playa y los otros niños me miraban como si fuera un bicho raro... tu me abrazabas muy fuerte; muchos se reían de mi, a otros les causaba curiosidad.-Pero no me importaba por que siempre he sido feliz en este mundo que tu y papá crearon para mi.-Es bonito ver tu sonrisa, y escuchar tu dulce voz acunándome.-Es maravillosa esta vida que me han dado, todo es único, por eso quiero decirte gracias mamá. Cumplo veinticinco años, me has vestido muy guapa, me gustan los globos de colorines y el pastel... un año más de felicidad... Hoy no cambio mi vida por ninguna otra”

-¿Qué haces cariño?.-

-Nada o todo, hablo con Ángeles y siento que ella lo hace conmigo... Ella es un ángel entre nosotros... Su mundo es simple y verdadero, puro y cristalino y siento que no podíamos haber tenido una hija mejor.-

 

UN ÁNGEL ENTRE NOSOTROS
                         PRIMER PREMIO CONCURSO "GALAS DE TALENTOS"
                                   FUNDACIÓN ONCE - FUNDOSA                                                                                   MADRID  (2006)
bottom of page